Hay una frase que comparto con
los participantes del taller, y que repito, desde la primera sesión: La Radio
No es Celosa. Mientras te acompaña permite que arregles la guantera aprovechando
la cola en la vía, cortes los vegetales del almuerzo o completes los ejercicios de cálculo, la demanda del cliente, etc. Por eso es fácil que te oigan, pero no te escuchen!!
Piensa en las veces que vas conversando con alguien en el carro, de
pronto “escuchas” algo que te engancha en la voz del locutor, y de inmediato
cortas la conversa para seguir el hilo del programa radial. Antes solamente
oías; la radio estaba allí, de compañera, de fondo. La frase, el sonido, la
intervención que hizo que “escucharas” te “movió”, causó alguna emoción en ti. En
ocasiones ni siquiera hace falta un interlocutor, te pierdes en pensamientos de
cosas que debes realizar ese día, o en recuerdos del día anterior. Si en el
próximo semáforo te tocan el vidrio de la ventana un joven con encuesta en
mano, y te pregunta :
Señor, ¿Qué emisora está escuchando? Rápidamente das tu
respuesta. Pero no la escuchabas, hasta ese momento solo la oías. Quizás algo que diferencia el
podcast del programa radial, sea por radio terrenal o por internet, es que cada
quien saca el tiempo “para escucharlo”, aunque pueda en ciertos momentos
resultar afectada por distracciones la escucha del contenido. Pero hay ya, de
comienzo, una “decisión” “voluntad” a escucharlo.
Para que te escuchen, ofrece contenido tan relevante, tan necesario, tan
importante como los pensamientos o la conversa del conductor. Logra que
escuchen ese comentario único, ó sentido, ó inteligente, acerca de la canción
que regalarás después. Mantén interesante el debate o la tertulia, incluso la
conversa entre dos voces, cuando se trata de dos conductores: el escucha
quieres engancharse con lo que comparten entre ustedes dos, y él o ella. De
resto, simplemente oyen a dos echarse broma uno al otro, cero gancho!
Recuérdalo: Escuchas... más que Oyentes!
El escucha responde y colabora
interactuando. El escucha no olvida. El escucha se enganchó!